Saludos desde lo más profundo de la región de Atlántida!!11
Como saben, los seres vivientes, de poco valor logístico, son expuestos a la más detestable y atorranta enfermedad de la mal llamada ''cultura'' cosa que no es más que una vil mentira que se propaga por los agentes extasiados y subversivos de la comunidad interplanetaria donde su efecto colateral, victimiza a los antropomórficos estados, obliterados de orgullo y suciedad, embarrando todo lo que se toca para amortiguar las escleróticas banalizaciones agudas permanecen sin concluir una forma de poder estelar de acuerdo a los años que se conmueven durante eones donde masifican a la cuestión donde se basurea y arrastra para volverlos más débiles, el ciberespacio acumula días y años y hasta meses de suciedad por los bípedos imbéciles auto glandulares y sin equipo, que manipulan los artefactos anunciados por la creatividad ontológica y el pacto nacido entre el rey Salomón y sus amigos del bajo mundo, esta festividad conocida como la ''cultura'' es un agente opresor y busca generar batallas sangrientas, despotrícales, que despachan de forma ceremonial revienta en catallaxia delirante al encontrarse con la simplificación gobernante y falluta mala amiga de color azul, sea como sea, estas formas ralentizan la gravedad comunicante y forman conocimientos distantes protoalgoritmicos y develado, acuñan la automórfica cutánea o lastrifica intensamente el consexo argumentofisiocratico, dueños de la fisión anual del plato formobasuralogico actual, santificando a la falsa comunidad vanguardista-escatológica.
Siguiendo en los años de la luna incognoscible, nos vemos a los que transportan las falsedades sobre los sueños herméticos y disfuncionales de una vereda, en la cual hay docenas de virtudes anacrónicas, masticando el ser en todo su esplendor, pérfidamente en una actualización constante de los dolores energéticos producto del vaciamiento humectante que llora donde quiera ir, máquinas que deforman los cuerpos y la virilidad de un cuerpo femenino.
Esto lleva a la completa fricción de formas en su estado más puro y peligroso, donde no caminan con piernas o abrazan con brazos, legándole eso al propio espíritu libre donde se llora a las más mínimas acciones, considerada por el ser de materia como victoria, equivocándose gravemente y yendo a una espiral sin fin donde el sufrimiento es eterno.